El iPhone es el centro del ecosistema más equilibrado que existe, el de Apple

Hay un término que se ha empezado a poner muy de moda de unos años hacia acá: ecosistema. Viene a englobar todo el conjunto de servicios, productos y opciones que una empresa le ofrece a sus clientes, sean actuales o potenciales.

En tecnología hay tres grandes empresas y las tres han dado los pasos necesarios para crear su propio ecosistema, cada una con un punto fuerte y con otros más débiles. Si dijéramos que Apple es la mejor en todo es obvio que faltaríamos a la verdad, pero lo que sí podemos decir sin equivocarnos es que Apple tiene un ecosistema más equilibrado que Microsoft y que Google, que destacan en puntos opuestos pero fallan en los otros puntos distantes.

Ya hablamos de esto en el episodio 16 del podcast de bemoob, donde le dedicamos a este tema la parte temática.

La importancia de un ecosistema es tal que no son pocas las empresas que son compradas, o tentadas, por estas tres grandes para que no haya ninguna pata coja en el esquema. Que Apple y Google pujaron por Dropbox es algo sabido, y como ninguna lo consiguió acabaron creando sistemas alternativos. Y es sólo un ejemplo.

[tab: El esquema]

Los ecosistemas de Apple, Google y Microsoft

Estas tres empresas con ahora mismo el centro de la informática de cara al usuario. No podemos perder de vista otras empresas como HP, IBM o similares con otras orientaciones, pero para el ciudadano de a a pie las tres nombradas constituyen casi el 100% de las noticias y novedades que le afectan.

Los tres gigantes han apostado por crear un ecosistema cada uno con algunas diferencias pero con muchas más similitudes. Así, los tres se centran en dos aspectos grandes, hardware y software, que se ramifican en otros más pequeños que también comparten.

El esquema es sencillo:

Como se puede ver no hay ninguno de ellos que sea perfecto.

[tab: Google y los móviles]

Google y los móviles

El punto fuerte de Google es su sistema operativo móvil, Android, y los servicios web de la empresa que se implementan realmente bien en estos dispositivos. Que internet va  hacia lo móvil es un hecho y en eso Google no tiene la ventaja que tenía antaño, hasta la masificación de este sistema, si bien sólo en smartphones, ya que en tablets flojea bastante más.

Los servicios web son algo en lo que Google no gana, arrasa. Quién no ha usado su buscador, sus mapas o su cliente de correo, ya sea con Gmail o con GApps.

Donde cojea, y mucho, Google, es en en su sistema operativo de escritorio, Chrome OS, que no ha llegado a cuajar, pese a las propuestas de ordenadores portátiles con un precio realmente bajo. La obligatoriedad de conexión a la nube y la incompatibilidad con el universo de Microsoft de forma sencilla han sido sus principales lastres.

[tab: Microsoft y los escritorios]

Microsoft y los escritorios

El caso de la empresa de Redmond es justo en contrario. Tienen un parqué de ordenadores de sobremesas tan impresionante que en pocos meses su nuevo sistema operativo, Windows 8, genera más tráfico que los móviles Android que hay por el mundo. No es una cifra baladí.

Pese a que no crean ordenadores bajo su propia marca Microsoft está virando hacia la idea de Apple, con productos como el Surface, un tablet que se posiciona entre el iPad y el portátil convencional.

Y en móviles tiene Windows Phone, actualmente en su versión 8. La apuesta por este sistema operativo ha sido tremenda, y la crítica lo ha alabado por traer frescura a un mundo donde pareciera que las ideas daban vueltas sobre sí mismas pero nunca para fuera. No obstante una cosa es lo que diga la crítica y otra es la que dicen las ventas. Y por desgracia para Microsoft, y para Nokia que se juega el todo por el todo con esto, aún no hay números que arrojen luz a este camino.

Pero también hay dos puntos en el que Microsoft brilla sobre Apple y Google. Uno es en el terreno de las consolas. Xbox es todo un éxito, y la integración que se está llevando a cabo con otras pantallas por medio de Smartglass no hace sino potenciar más aún las opciones de este segmento. Otro es el de la comunicación y mensajería, aliándose con Facebook y comprando la empresa más icónica de VoIP: Skype.

[tab: Apple y el equilibrio]

Apple y el equilibrio

Apple no tiene la potencia de Google en los móviles, y no tiene la de Microsoft en los ordenadores. Pero por así decirlo sería el segundo en ambos aspectos.

El iPhone ha creado un nuevo paradigma de smartphone que ha dado lugar a las nuevas generaciones y sistemas operativos. No es el móvil más vendido del mundo pero sí el icono aspiracional de millones de personas.

Este éxito que Apple logró con su primer móvil lo repitió con su primera tablet, el iPad. Han tenido que pasar años para que la competencia lance productos competentes que le hagan algo de daño a este dispositivo.

El los ordenadores Apple tiene los Macbook en portátiles y los iMac y Mac Mini en sobremesa, que se sitúan entre los mejores de sus respectivas gamas.

No tiene videoconsola, es cierto, pero actualmente el móvil se convierte en el dispositivo de juegos más usado, y en pocos años podríamos ver un cambio lo suficientemente grande en este sentid como para que no tenga razón de ser la creación de un hardware específicamente pensado para jugar.

En el software iTunes primero y APPstore después son dos ejes que han creado todo un paradigma copiado por sus competidores. La carencia de un servicio de alojamiento y sincronización en la nube fue resuelta por iCloud, y la mensajería por Facetime y por iMessage, si bien deben mejorar para ponerse líderes en este ramo.

[tab: Conclusión]

Conclusión

Si bien ninguna de las tres empresas tiene un monopolio sobre el ecosistema perfecto es cierto que Apple tiene el más equilibrado. Un usuario puede tener un ordenador de sobremesa, otro portátil, un tablet y un móvil con los servicios de Apple y sólo debería usar algunos externos como el buscador.

En Google careceríamos de un ordenador de sobremesa o portátil decente y en Microsoft, si bien es aceptablemtne completo el conjunto la parte móvil, tanto en tablet como en smartphones, nos dejaría algo descolocados.

Baste decir que estos ecosistemas son interoperables y que no hay nada que impida a un suuario coger lo mejor de cada uno, si bien el precio a pagar es un incremento de la complejidad y un descenso de la comodidad.

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